Psychoanalysis in Mexico in an extensive cultural approach. Three interrelated essays.

Gabriel Vargas Lozano.

El renombrado psicoanalista mexicano Raúl Páramo, discípulo de Igor Caruso, reúne en este libro tres importantes ensayos.

El primer ensayo aborda la “Historia del psicoanálisis en México”. Se pregunta: ¿cuándo se empezó a leer a Freud  en México? ¿cuáles son las causas de su recepción tardía?  ¿cuál ha sido el decurso del desarrollo del psicoanálisis en este país?  ¿cuál fue la influencia de uno de los más distinguidos miembros de la Escuela de Frankfurt como lo fue Erich Fromm, quien residió en México por muchos años? ¿cuál fue la labor pionera de Santiago Ramírez, célebre médico-psicoanalista que publicó, entre otros libros, Infancia es destino? ¿cuáles fueron las principales organizaciones psicoanalíticas y sus contradicciones internas? ¿cómo influyó el psicoanálisis en el mundo católico a través del sacerdote belga, Gregorio Lemercier? ¿cómo influyó en México el exilio argentino trayendo a figuras como Lacan? El Dr. Páramo responde en su ensayo a estas y otras preguntas, concluyendo que, en la actualidad, “El psicoanálisis en México maneja predominantemente el concepto de que éste es sólo una forma de “terapia” ignorando gravemente su sentido de crítica social que busca cuestionar el “inconsciente cultural” que nos configura”.

El segundo ensayo se titula “¿Hay un medio cultural favorable o desfavorable para el desarrollo del psicoanálisis?”. El psicoanalista mexicano contrasta el medio cultural en que surge Freud en Viena y el medio de desarrollo del psicoanálisis en Latinoamérica. En Austria se presenta un entrecruzamiento de factores lingüísticos, científicos y culturales que lo propician, interpretados por una figura genial. Sin embargo, también surgen lo que Páramo llama “factores tóxicos” que dificultaron su desarrollo como lo fueron el antisemitismo y el nazismo. En  cambio, en Latinoamérica se presenta, entre otros, un analfabetismo funcional instituido e inducido que “impide la creación del tejido social democrático” el cual sería el caldo de cultivo para el desarrollo pleno del psicoanálisis. Páramo registra también una tendencia a eliminar el aspecto crítico del psicoanálisis en los últimos tiempos. Para poder recuperarlo se requiere practicar la interdisciplina y recuperar la problemática del lenguaje ya que, como decía Humboldt, existe una conexión entre lenguaje y visión del mundo. “El inconsciente habla más de un dialecto” decía Freud. “El lenguaje no sólo guía al pensamiento sino que frecuentemente lo seduce. Lo seduce –dice Páramo- por la vía de lo que culturalmente ha sido reprimido.”

El tercero de ellos, titulado “El trauma que nos une” es un esclarecedor análisis de un problema central de la identidad de los mexicanos y latinoamericanos. Se trata del trauma psicológico y social que fue provocado por la destrucción violenta de una cultura milenaria como la indígena por la conquista y la colonización. El tema ha sido abordado por un amplio conjunto de autores que son estudiados por el autor: desde Octavio Paz hasta otro Premio Nobel como Le Clézio; de Todorov a Darcy Ribeiro y Bonfil Batalla entre muchos otros. El Doctor Páramo, no sólo caracteriza un trauma (como el padecido por otros pueblos como los negros en Norteamérica o los judíos en la Alemania nazi) sino que propone las formas de superación del trauma y al mismo tiempo, los serios obstáculos que deliberadamente la impiden para mantener a todo un sector de la población sujeto a la opresión y la sumisión.

Si quisiéramos definir un propósito central del programa de investigación de Raúl Páramo diríamos que así como Alexander von Humboldt inició en las ciencias naturales la observación de que el crecimiento de ciertas plantas estaba relacionada con la altura de las laderas del Chimborazo en que crecían, así debemos pensar las ciencias sociales y la Historia de las ideas. Raúl Páramo lo logra a propósito del Psicoanálisis como producto cultural  en interrelación con otros campos lingüísticos. Esta aportación del autor vale el libro completo.

Finalmente, en Páramo Ortega se percibe la lucha contra la difícil tarea de ser mexicano y ser psicoanalista al mismo tiempo. Él escribe “entre líneas” lo que implica una reflexión histórica permanente. Además es consciente de que su punto de vista no lo hace precisamente popular ya que se expresa en contra de la corriente. Él sabe que algunas de sus ideas no sonpolitically correct, pero ¿no ha sido así toda la historia del pensamiento?