Ningunear: ninguno, ni siquiera es alguien, es nadie

 Alberto Sladogna

Recuerdo una tarde, como oyera un leve ruido en el cuarto vecino al mío, pregunté en voz alta:” ¿Quién anda ahí?” Y la voz de una criada recién llegada de su pueblo contesto “No es nadie señor, soy yo”

Octavio Paz, El laberinto de la soledad, 1959

En México ¿Cómo se articulan las formas del amor surgidas al calor del discurso del amordeno? Esto es un tema pertinente para estudiar y discutir entre quienes compartimos la iniciativa de “Escucharte”, dado que esa oferta que hemos lanzado será tomado por ese discurso, no es una iniciativa “neutra” o “estéril” o “aséptica”, es una iniciativa que se presenta tomada por esa red discursiva, misma red que toma a la gente de carne y hueso a la cual dirigimos esa oferta. Es decir, con la harina de ese discurso haremos el pan que sea viable hacer.

Para eso con motivo del intercambio surgido en la reunión del jueves, del cual no todos pudieron participar por dificultades técnicas les hago llegar este documento para que luego, lo hacemos circular y seguimos el intercambio. La pregunta era la siguiente ¿A qué se debe que la gente que se dirige a “Escucharte” pone por delante o insinúa el tema de la “gratuidad”? Eso ¿a qué forma de subjetividad corresponde? Más allá de haber ya resuelto insinuaciones de nuestra publicidad que “alentaba” una tal posición, en particular, en la página –la presencia del significante “ayuda”, y que el tema del pago no estaba en forma clara más explícito-, habiendo visto ya eso, les propongo algunas ocurrencias para abordar ese interesante y delicado tema de la clínica doctrinaria y de la experiencia de un análisis.

Si un análisis produce efectos en la cura lo hace a partir del amor adjetivado por Freud como “transferencia”, amor basado en la experiencia “paternal”- “imagos paternas”-, estilo del que Jacques Lacan indicó su caducidad, reformuló, y subvirtió, en más de una ocasión en sus diversas formulaciones doctrinarias. Señalo sólo dos de esos movimientos:

Primer movimiento:

1.-A lo largo de 17 sesiones de su seminario oral de 1960/1961, La transferencia en su disparidad subjetiva, su pretendida situación , sus excursiones técnicas se localiza un movimiento: Sin decir agua va, él se mueve en la superficie –lugar donde los elementos se ocultan con facilidad; cambia el nudo del “ amor de transferencia”; mientras que en Freud ese amor descansaba en una única vertiente: el amor paterno heterosexual y neurótico –de ahí que Freud excluía de esa “transferencia” el amor de los llamados “psicóticos” y de los “perversos”, como Freud lo práctico en acto en el caso de “la joven homosexual”; Lacan propuso en la clínica de la doctrina otro amor, organizado por la pareja de la semejanza, es decir, por la experiencia de los hombres homosexuales, nadie advertido podría sostener que Lacan era un comentarista de la erótica griega, él hablaba de esa erótica y de esa práctica en la actualidad de su doctrina y de la cura analítica . Eso que él decía lo afectaba de manera performativa a él . Subrayamos en su seminario oral de 1960/1961 Lacan presentó un amor alejado de la vida paterna, “neurótica” y heterosexual; la cuestión se desplazo hacia otro horizonte subjetivo: la experiencia del amor de los hombres homosexuales.

Quizás, ese movimiento, por quedar “ligado” a la “transferencia”, pago como precio el desconocimiento con el cual sigue siendo recibido. Subrayo que ese invento de Lacan era arriesgado debido a que en aquella época, y en el momento actual, quienes asisten a un análisis suelen estar tomados por la heterosexualidad neurótica que en Occidente sigue siendo hegemónica en las formas de vida y en los complejos familiares. Conviene destacar las “dificultades” que Lacan “descargó” sobre las mujeres –les adjudicó no poder dar cuenta del amor, y de la experiencia erótica- ante su imposibilidad o dificultad o ignorancia o vaya saber qué inconveniente las mujeres le producían a su doctrina, la de él frente al amor vivido por el heteróclito campo de las mujeres .

Lacan estaba advertido que tomaba apoyo en una práctica del “amor” surgida y desplegada en el marco de una sociedad de amos; la cultura griega fue el paradigma de la sociedad del amo y del esclavo, su democracia era una democracia sólo de y entre los amos. En Grecia era clara la distancia erótica frente a la vida reproductiva: el sexo con una mujer, y la erótica de las formas de la relación amante-amado que se desplegaba en la sociedad de la polis, en la política, era un amor entre iguales, sólo eran iguales los amos entre sí.

Entonces, quizás, en el caso de México, convendrá tomar nota de un hecho, todas y/o casi todas las campañas políticas llevan al despliegue de rumores sobre la vida de hombres homosexuales de los políticos y de las políticas. Al menos ese trazo es digno de ser tomado en cuenta para el estudio del discurso del amordeno en sus diferencias con el almor desaforado. Un psicoanalista de México, que tiene una vida rarita, indicaba con precisión un hecho:” En México no salimos del closet pues nunca estuvimos allí”. El “machismo” es una vía abierta y no oculta para transitar las formas raras de la vida erótica: las Adelitas ; la pareja del 1er. Secretario de Guerra de la Revolución –cfr: Por debajo del agua-; la temática erótica de la Malinche está a la espera de que los analistas, en México, despleguemos sus enseñanzas.

Segundo movimiento de Lacan

2.- Otro cambio, insisto que sólo tomo dos de los que efectuó. Ese otro cambio se produce como al pasar el 13 de marzo de 1973, lo transcribo a la manera de Jacques Alain Miller del seminario oral de Jacques Lacan, 1972/1973, Otra vez:

“Aquí debe ayudarme la lengua, la francesa, no ofreciéndome, como a veces ocurre, una homonimia entre d’eux y deux (de ellos y dos), peut y peu (puede y poco) —vean ese il peut peu (poco puede) que al fin y al cabo está allí para servirnos de algo— sino simplemente permitiéndome decir que se alma. Yo almo, tú almas, él alma. Ven que aquí sólo nos sirve la escritura, hasta para incluir nuncamás, nuncalmás. Se puede, entonces, cuestionar la existencia del alma, y sería el término propio para preguntarse si no será un efecto de amor. En efecto, mientras el alma alme al alma, no hay sexo en el asunto. El sexo aquí no cuenta. La elaboración de la que resulta es homosexual como puede leerse claramente en la historia.”

Este señalamiento no pertenece en exclusiva a la lengua francesa, pues se trata de una estructura que proviene del lenguaje, debido a que sólo el lenguaje, esa maquinaria plural (con sus reales, sus simbólicos, sus imaginarios, sus santhomáticos), esa máquina inventó el amor (Lacan,18/12/1973).El amor con sus estructuras es el resultado de un ´termino del lenguaje, la palabra “amor”, sin ella no hay amor, ni amante, ni amado. El almor también se encuentra en el español o en el castellano expresiones tales como “Eres mi amor del alma”; “Te amo con toda el alma”, “Te amo con todo el alma”; “Alma, te amo”.

En tal sentido convendría darle algún lugar, al fenómeno del amor en la ciudad, en la polis, en la política, así en México desde hace unos años circula, una singular manifestación del amor: “Te amlo desaforadamente”, frase que no impide su lectura anagramática: “Te almo desaforadamente”; ese amor singular se orienta por un cuestión de la cura analítica: “Amo a quien me dirijo para localizar el ser del lenguaje que responda por una pregunta ¿Quién soy?” Esa forma y estructura mística del almor no es patrimonio exclusivo de la lengua “mexicana”, también se da en la lengua charrúa mediante la aparición en la escena pública de un personaje como el “Pepe” Múgica .

El discurso del amo, versión antigua y/o versión moderna, se presta a fomentar prácticas subjetivas que sean acordes con el mismo; lo cual subraya un elemento al que hará frente el inicio, el trascurso y el fin de una experiencia. Sólo subrayo un detalle: cuando se dice “El analista sólo se autoriza por sí mismo” ¿es igual?, ¿es semejante?, ¿tiene los mismos alcances? si a la manera de Jacques Lacan decimos que “El analista sólo se autoriza por él mismo”. La primera versión concuerda paso a paso con el discurso del amo (ver al respecto: Martín Luis Guzmán, La sombra del caudillo; Ángeles Mastretta, Arráncame la vida) La primera expresión: ”El analista solo se autoriza por sí mismo” carece de diferencias con la frase subjetivante de la que o del que hace algo “Por sus pistolas” o “Por qué se me pega”

La temática del amordeno no es ajena a la puesta en marcha de la red del colectivo de analistas “Escucharte”, debido a que quienes son convocados por la oferta de “Escucharte” tienden a colocar su demanda en términos de ese discurso. Es decir quien lo hacen no son “víctimas” de esa formación discursiva, sino que son parte integrante del mismo. Y en el análisis no es factible tocar tal o cual cuestión subjetiva sin quedar tomado por las diversas prácticas discursivas. Por eso conviene, detenerse y comenzar a estudiar ese discurso del amo en su singularidad de México, quizás eso nos dará pistas para desplegar, estudiar e interrogar el discurso del amordeno.

Ese discurso Lacan le dio una forma, una formalización que es la siguiente:

S1->S2
$ a

Como dato cómico respecto del tema de la conquista, de la colonización, observamos que las ediciones castellanas no se atreven a colocar sobre este discurso la letra “A”, y conservan la letra “M”, que proviene del francés donde Lacan juega con “Maitre” en tanto que “Amo” y en tanto que “Maestro”.

Lacan indicaba lo siguiente respecto del discurso del amo, lo cito a la manera de Jacques Alain Miller del seminario oral de Jacques Lacan, 1969/1970:

Es importante saber que siempre fue usado en la política y que es extraño, es singular ver que una doctrina, como la de Marx, que instauró la articulación sobre la función de la lucha, la lucha de clases, no impidió que de ella surgiera algo que es, por el momento, el problema que a todos se nos presenta, a saber, el mantenimiento del discurso del Amo, obviamente no tiene la misma estructura que el antiguo, en el sentido en que instalase en el lugar indicado por las letras sobre esa M, sino aquel que a la izquierda yo introduzco con la U [discurso universitario] Les diré porqué. Lo que ocupa el lugar que provisoriamente llamaremos dominante, aquí, es esto, S2, cuya característica es ser, no saber de todo, no estamos en eso, sino todo saber…En mi primera enunciación, la de hace tres semanas, partimos de que el saber, en la primera forma del discurso del Amo, es la parte que le corresponde al esclavo Y creí poder indicarles , sin estar en condiciones de desarrollarlo a causa de un nimio contratiempo que lamento, que lo que produce el pasaje del discurso del amo antiguo hasta el del amo moderno que llamamos capitalista, es una modificación en el lugar del saber. Lo que queda es, en efecto, la esencia del amo, es decir, que no sabe lo que quiere. He aquí lo que constituye la verdadera estructura del discurso del Amo. El esclavo sabe muchas cosas, pero lo que sabe más todavía es qué quiere el amo, aunque éste no lo sepa, lo que suele suceder, porque de otro modo sería un amo. El esclavo lo sabe, y ésta es su función como esclavo. Por eso la cosa funciona, puesto que sea como sea todo está funcionando durante bastante tiempo (17/12/1969)

A partir de esa propuesta nos quedan preguntas ¿Cuál es la forma de subjetividad que está encarnada en el esclavo que se mueve entre el discurso del amo antiguo y el del amo moderno, o sea el discurso del saber universitario? Quizás, haya una pista a seguir, respecto de la facilidad con que en nuestro país se produce la suposición de titular como “doctora” o “doctor” a quienes reciben solicitudes de análisis. Se da una combinación entre el saber popular y la búsqueda del saber que los doctores tienen o portan, es decir, esto tienen el saber que viene con el certificado de “científico”, tiene como sostén a la ciencia.

Con estos antecedentes propongo abordar la temática subjetiva que concierne a las respuestas frente a la oferta de “Escucharte”:

a.- el inicio de una práctica analítica alejada de las convocatorias de las “instituciones”, sean públicas o privadas. Esa práctica tiene que hacer frente al estilo de la práctica del ama del discurso del amordeno; “beneficencia”; “acarreo” ;”dadiva”; la “bola”; la “obligación de repartir las monedas que se caen del bote”; baste ver la oferta de “instituciones” freudianas –la APM- y lacanianas organizadas por el “honorarios para personas de bajos recursos”;”honorarios institucionales”;

b.- El verbo ningunear es, a la manera de Jacques Lacan, un buen pasaje al español o castellano de la llamada forclusión, término francés empleado por Lacan para dar cuenta, en un momento determinado de la llamada “psicosis”; el término pertenece a la gramática compartida del francés –ver los estudios de Pichon y Damourette- ; a su vez es parte del lenguaje jurídico de esa lengua y de otras, en particular en América Latina – se trata de un derecho que tiene una fecha límite de empleo, pasada la misma ya no se puede invocar pues caduco-; en medicina ese término da cuenta de la fecha de caducidad de los medicamentos. Bien entonces es posible sostener que el verbo ningunear es una forma y estructura que deja pasar al castellano o español la operación descripta por Lacan desde 1953 hasta 1959 y retomada en 1975/1976. Indico el castellano o el español pues en países de América Latina que se habla una u otra de las variantes está presente el término “ninguneo” y el verbo “ningunear”. Se trata de una operación mediante la cual el Otro u el otro o ambos decretan la reducción a nada de alguien, tal como lo muestra la cita de Octavio Paz. Ningunear es excluir de un régimen simbólico a un elemento y en consecuencia carece de existencia, al menos para ese sistema simbólico y sus lazos con su real y su imaginario. Esa operación no deja de producir un sánthoma. Ese sánthoma interroga el campo dónde se presenta, así la “criada” descripta por Paz a ¿dónde pertenece? ¿Ella es el síntoma de Paz? o ¿Paz es el síntoma que ella requiere sostener para “conservar” su trabajo? Añadimos otro elemento del ninguneo en México, en particular, frente a los jóvenes que no encuentran en el discurso oficial cabida y que en el discurso de la oposición no tienen lugar, el “nacionalismo cardenista” de AMLO no parece entusiasmar a los jóvenes de las grandes ciudades, entre otras cuestiones, pues los temas de la sexualidad, el erotismos, los deportes de alto riesgo, la música, al vida en internet, las drogas como vía del plus de goce. Un objeto a, no son componentes de ese discurso detenido en el tiempo, hecho que puede verificarse al observar las manifestaciones o fotografías de las Adelitas. Los jóvenes de la ciudad, los jóvenes universitarios, por ejemplo, no tienen cabida en varios de los discursos, incluido allí el “discurso psicoanalítico” donde campea el dominio del saber.

El escritor Jean-Marie Le Clézio recibió el 10/10/2008 el premio Nobel de Literatura. Obra atravesada por un hecho del lenguaje: francés nacido en Mauritania, es un condenado de la tierra, como diría Franz Fanón (Los condenados de la tierra). Condenado a vivir esa vida, allí nació, nació en tierra de una colonia y lleva la nacionalidad y la lengua del colonizador, quizás, gracias a eso es sensible al tema de la conquista y sus consecuencias para el conquistado y para el conquistador, como parte de eso él ha decidido desde hace varios años no habita de manera permanente ni en Francia ni en Mauritania.

Autor de numerosos libros de México, entre otros «Relación de Michoacán», «Las profecías de Chilam Balam”, «Diego y Frida”, un amor en la revolución. Una se titula: El sueño mexicano o el pensamiento interrumpido. Allí sostiene una tesis: la destrucción inesperada y fatídica del mundo prehispánico privó a la humanidad de un surtidero filosófico que habría modificado el rumbo de Occidente, como lo hicieron el budismo y el taoísmo. Es notable como estas últimas posturas espirituales suelen tener un lugar entre los sectores intelectuales de las grandes ciudad des de México. Le Clézio pone el acento, con o sin propiedad, en un hecho: el espíritu fue afectado por la conquista; así, como el espíritu de un intelectual colonizado queda afectada por nacer en un país colonizado y tener la nacionalidad del país colonizador. Subrayamos que en México el virreinato llevó por nombre: “Virreinato de la Nueva España”, y a eso se le suma un hecho notorio y notable, en México hablamos el “Español”, la lengua del conquistador; hablamos la lengua oficial del Estado Español. Esto fue el objeto de una primera intervención en México, DF, de Albert Fontain, mexicano, analista, quien hizo su análisis con Lacan y que vivió hasta su muerte en París, Francia. Él condujo a la elp a interesarse de manera directa en el tema del tratamiento de la llamada esquizofrenia. Cuando efectuó esa intervención se quedo esperando alguna respuestas de quienes asistimos a la misma…quizás todavía en algún lado la esté aguardando.

Mientras los colonizadores ocupan un territorio más o menos desértico, luego lo pueblan con su lengua y con su población, por ejemplo, el caso de Argentina, Chile, Uruguay y Brasil; mientras que los conquistadores ocupan territorios ya habitados y someten a las poblaciones que ya están ahí, una parte del sometimiento es garantizar la sobre determinación de su lengua entre los conquistados, caso de México, Guatemala, Vietnam, Cambodia, Haití, y otros.

Christopher Domínguez Michael, hombre dedicado a las letras, perteneciente al núcleo duro que quienes son reconocidos como “defensores” de la obra de Octavio Paz; él escribía en la desaparecida revista Vuelta que dirigió O. Paz y escribe en Letra libres, dirigida por Enrique Krauze. Domínguez Michel no es ajeno al mundo “psi…”, por el costado fraterno y por el costado paterno, escribió un boletín de prensa del Fondo de Cultura Económica, casa editorial que dio a conocer una parte de los textos de Le Clézio en nuestra lengua. Ese boletín era una forma en que esa editorial daba cuenta del premio obtenido por Le Clézio.
Domínguez Michael seguidor de la obra de Octavio Paz. En el boletín dictamina: “Si el lector lo comparte buscará en vano en Le Clézio alguna lección de filosofía comparada que lo respalde. Más fecunda es una contradicción en la que Le Clézio incurre a cada rato: subraya el carácter renacentista de la empresa de Cortés y, a la vez dice, lo cual es interesante, que los españoles también venían de un mundo de magias y prodigios que los hacía contemporáneos de los aztecas” Luego, fulmina: “Alumno aplicado, Le Clézio hace las habituales chambonadas que dice un extranjero (Le Clézio en México o yo en China, da igual) en cuanto se siente impelido a interpretar, recurriendo a la guía mitológica, el país que visita. Relaciona Le Clézio al mito de Quetzalcóatl con las leyendas esparcidas en Morelos sobre el eterno regreso de Emiliano Zapata cuando sopla el viento.” Para comenzar conviene anotar que la equivalencia (“Le Clézio o yo en China da igual”) sólo era, quizás, válida antes de que el autor francés obtuviera el premio Nobel, luego de recibirlo, a nivel de las letras chinas dudamos de que se sostenga la igualdad.

La nota de Michel contiene otro elemento singular, acusa a Le Clézio no haber leído, actuales investigaciones, supongo, de historiadores que demostrarían que la empresa de la conquista español no viene del Renacimiento sino del régimen feudal o la inversa. No se pone en duda ese dato, sólo que es extraño indicarle eso a un autor que escribió el texto objeto de comentario muchos años antes de que estén disponibles esas nuevas aportaciones. Esa singular crítica deja abierta una posibilidad, Domínguez Michel ¿habrá leído esos textos de los que acusa a Le Clézio de no haber leído? Si los leyó ¿cómo fue que los leyó?

Domínguez Michael en ocasiones tiene un estilo singular de lectura: practica la lectura telepática, es receptor pasivo de lo que otros escriben, esa forma de leer prescinde del texto impreso ¿Será una lectura virtual?, si lo fuera ¿De qué clase es esa virtualidad? pues internet si tiene textos virtuales pero los tiene; con esa forma genuina, como cualquier otra de leer, con ella sostiene críticas sesudas, documentadas sobre la obra de Jacques Lacan, del cual no ha leído una sola línea, una sola línea impresa, el crítico, gracias a la telepatía sabe, conoce, estudia sin leer lo impreso que crítica. Baste con observar que sus reflexiones críticas respecto de Lacan y de Foucault aparecidas en el suplemento cultural El ángel del periódico Reforma, no contienen una sola cita de tal o cual texto de los autores criticados. Otro rasgo pertinente para estudiar el discurso del amo y el discurso del amo moderno, el universitario, en México, es notar que un periódico un poco más que conservador como Reforma abre sus páginas a los intelectuales “progresistas”; algo semejante a que Carlos Monsiváis haya recibido de manos de Josefina Vázquez Mota un premio, un reconocimiento y un cheque con motivos de sus setenta años, el cheque era por la edición de 30 mil ejemplares de una de sus obras; Margo Glantz quien suele escribir ensayos y novelas de la vida y obra de Sor Juana, no se tienta en hacer crónicas en el periódico La Jornada, sobre sus viajes pagados por el estado desde la India hasta los EEUU. Estas formas de la intelectualidad no parecen ajenas al discurso del amo, al discurso del Príncipe que en el Renacimiento sostenía a los pintores, escultores, secretarios y filósofos como parte de su corte. Al respecto es bueno estudiar lo que dice el intelectual que funge como asesor del caudillo en La sombra del caudillo.

También más que pertinente para continuar nuestros intercambios respecto de este tema para leer, escuchar y estudiar la voz del ama del amo, en tal dirección varios de las investigaciones de Sara Sefcovich(La suerte de la consorte ) dan buen material para el estudio clínico del lugar del ama, de la mujer en el discurso del amo.

Christopher Domínguez Michel y el autor de estas líneas compartimos algo: nuestros nombres y apellidos provienen, sin lugar a dudas, del mundo pre-hispánico, por lo tanto llama la atención su frase racista y xenofóbica: “las chambonadas que dice un extranjero (Le Clézio en México o yo en China, da igual)” No tengo elementos para calificar de “chambón” a Le Clézio (Ese término “chambonadas”;”chambón” ¿no son un argentinismo?) Las “chambonadas” ¿ para qué cargarlas al “extranjero”? Esa carga tiene un dispositivo que la produce y la mantiene, es una teoría cuyo enunciado nodal sería algo así: “El extranjero no entiende a México, los mexicanos nos entendemos solos”. Esa postura de la soledad sostiene la práctica erótica del autoservicio –la chaqueta mentada y de la otra. Domínguez Michael saliva hacia arriba al descalificar por “chambón” extranjero a Le Clézio, se descalifica solito, él revela que su ser del lenguaje no ha logrado hacer lo propio, aún lo tiene como un trazo excluido que lo persigue. El trazo de la chambonería queda excluido al estar albergado en la punta de su nariz, de ahí la persecución que le surge cuando un semejante, otro hombre de letras, muestra lo que él tiene en su nariz. La chambonada, lo chafa no tiene raza ni nacionalidad, está democráticamente repartida, reparto posible de ser vivido si se le reconoce.

Octavio Paz escribió durante una estancia en Paris “El laberinto de la soledad”, él no se preocupaba de cuestiones xenofóbicas, se ocupaba de la soledad generada por el ninguneo. Ningunear es una práctica aristocrática de la conquista hasta hoy sostenida por la actual aristocracia constituida por la “familia revolucionaria, empresarial y financiera”; ella excluye de la palabra, del sueño y del pensamiento a los conquistados. Y a ese estado de “conquistados” nos conviene interrogar, estudiar y leer, así como su efecto sobre el conquistador. El conquistador suele ver esa opción de vida –vivir desde el lugar de esclavo- con frases tales como “Son unos huevones que no trabajan”; “Siempre están tirados debajo de un árbol”, ”Estos se gastan sus dinero en p…”. Lo singular es que cada una de esas frases, y otras semejantes, apuntan a un punto del plus de goce del esclavo, plus que el amo no se atreve o no logra o no puede o no…acepta vivir pues él se dedica a trabajar, el goce vendrá ene l futuro.
Por el otro lado de la cinta de moëbius del discurso del amo, están los esclavos. Estos viven bajo ese régimen, no les queda de otra: “¿Qué hora es?”, pregunta un comensal del restaurante “Au pied du Couchon”, el mesero responde “La que usted quiera, señor”. El mesero sabe el deseo del amo: este desea preguntar la hora pues él no puede ver su reloj. La respuesta del mesero responde al ninguneo a su misma altura:”A usted no le doy ni siquiera la hora, sólo hago como que se la doy, mi mundo es otro”.

Jean Marie Le Clézio reconoce que Morelia le cambió la forma de hacer el amor, de soñar, de comer, de vivir. ¿Extranjero? Si, extranjero frente a la tontería de algunos mexicanos. Veamos un caso.

Carstens/ Ortiz, singular pareja mexicana, integrada por el Gordo, Secretario de Hacienda (Carstens) y el flaco (Ortiz), Director del Banco de México. Pareja acunada y forjada al calor de la familia revolucionaria, otra institución de los complejos familiares del discurso del amo, esa pareja combina, en justas proporciones, el discurso del amo antiguo, Ortiz es el hijo de Ortiz Mena, prohombre del sistema del PRI y Carstens, kilos aparte, es un tecnócrata del discurso universitario. Esa pareja declaró sin mucha vergüenza ni inhibición –con todos sus títulos a cuesta- que no se dieron cuenta de la crisis financiera que se avecinaba y que descargará sobre el resto de la población una tsunami de diversa índole y consecuencia; ellos no “sabían” de la crisis.

Al mismo tiempo, en México, el “Magic” Johnson explicó lo que él hizo frente a esa anunciada crisis. Se trata de un ex jugador de basquetbol , deporte donde fuera famoso, además de que terminó su carrera a consecuencia del SIDA, y a lo cual le sumo que es uno de los primeros afectados en haber eliminado de su cuerpo el virus; este ex¬-jugador que proviene de una familia, donde a él le tocaba recoger junto con su padre basura para hacer aportes a la economía familiar; ese ex¬-jugador es hoy uno de los propietarios , o quizás el único, de la cadena Starbucks de café; él explicó como protegió su fortuna 15 días antes de la crisis financiera, simplemente retiro su dinero de las bolsas y de los fondos de súper-rendimientos y los invirtió en otros lugares para protegerlas y proteger las fuentes de empleo de sus empleados.

El sueño mexicano o el pensamiento interrumpido´, en el año 2006, algo de eso ocurrió, al menos para un porcentaje cercano al 50 % de quienes concurrieron a votar, la semana pasada un tribunal electoral, confirmó DOS AÑOS DESPUÉS y condenó una operación, la guerra sucia del Consejo Coordinador Empresarial, destinada a interrumpir un sueño, a la interrupción de una palabra ¿Será así en forma definitiva? ¿Será como quiere la Señora, o el Señor? ¿Qué horizonte se requiere para que cada quien le dé un lugar al deseo que lo envuelve? Quizás la experiencia de “Escucharte” permitirá construir alguna respuesta, esa es su apuesta.